El término “prepago” es una práctica controvertida en Colombia, especialmente en Cartagena, ciudad costera famosa por su belleza natural y su patrimonio histórico. Se refiere a una forma de prostitución en la que las mujeres, a menudo jóvenes y económicamente vulnerables, ofrecen servicios sexuales a cambio de dinero. Este artículo examina los diversos retos y abusos asociados al prepago en Cartagena y Colombia. Prepago también significa pagar por adelantado, sobre todo para actividades turísticas en Cartagena.
Los orígenes del prepago

Las raíces del fenómeno del prepago en Cartagena son complejas y multifactoriales. La pobreza, la falta de oportunidades económicas y la desigualdad social son los principales factores que llevan a algunas mujeres a dedicarse a esta actividad ilegal. El turismo sexual también desempeña un papel importante, sobre todo con visitantes extranjeros que buscan experiencias sexuales baratas.
Desafíos sociales
Explotación y vulnerabilidad: Las mujeres implicadas en el prepago suelen ser explotadas por proxenetas o redes criminales, lo que las coloca en un estado de extrema vulnerabilidad.

Impacto en la salud: Los riesgos para la salud, incluidas las enfermedades de transmisión sexual, son muy elevados debido a las prácticas sexuales sin protección.
Estigma: Las mujeres que practican el prepago se enfrentan al estigma social y la discriminación, lo que dificulta su reinserción en la sociedad.
Esfuerzos para combatir los retos
Las autoridades colombianas y las organizaciones locales trabajan conjuntamente para mitigar los excesos del prepago, poniendo en marcha iniciativas para proteger los derechos de las mujeres implicadas, ofreciendo alternativas económicas y concienciando sobre la prevención de enfermedades.

Aunque el término “prepago” también se refiere al pago por adelantado de actividades turísticas en Cartagena, es importante reconocer que la realidad de la prostitución y el turismo sexual en esta región es un tema complicado y problemático. Las mujeres en esta situación se enfrentan habitualmente a problemas sociales, explotación, riesgos para la salud y estigmatización.
Los esfuerzos para mitigar estos abusos incluyen iniciativas para proteger los derechos de las mujeres implicadas, promover alternativas económicas y concienciar y prevenir enfermedades. Sin embargo, aún queda mucho camino por recorrer para garantizar una sociedad más equitativa que respete los derechos de todos en Cartagena y Colombia. Sin embargo, para descubrir la bella ciudad de Cartagena, puede dar un paseo en la rumba chiva.
En conclusión, el prepago en Cartagena y en Colombia es un problema complejo que afecta a la pobreza, al turismo sexual y a los derechos de las mujeres. Aunque se están tomando medidas para combatir sus excesos, aún queda mucho por hacer para garantizar una sociedad más justa y respetuosa con los derechos de todos.